Mi querido Javier:
Hoy cumples dieciocho “añazos”,
acontecimiento que te convierte en mayor
de edad al igual que a la prima Amalia
hace unos días y a la que dedicaré otra
entrada, ya que en su momento no me fue posible.
Bueno, ¿y qué hacemos contigo y con tu mayoría de edad?
Estoy segura de que ni tú lo sabes, pero, al menos, te diré qué pienso y sé que
dirás: abuela, lo sabía.
¡Claro que lo sabes y sabéis todos!, pero mira por
dónde te voy a dar una sorpresa, ya que son tus
mismas palabras de hace unos
añitos las que te van a hablar.
Poesía
de mi Javier
………..
Rojo
del amor,
verde
las hojas,
nuestro
mundo, una flor
que,
poco a poco, se deshoja.
Me
gusta mi mundo
pero
lo contaminamos.
Lleno
de flores, de aire, de agua…
¡Y no
lo cuidamos!
Este
es mi planeta
sin
rumbo, sin veleta.
Pero
debemos luchar
para vivir
todos en paz.
Javier.
5º B
¿A que ni te acordabas de esta poesía tuya? Pues, para que
veas cómo las abuelas y abuelos queremos tanto a los nietos que todas sus
cositas las vamos guardando.
Así que solo quiero decirte con tus mismas palabras que
luches por vivir tú en paz y que así se
vaya construyendo el mundo que nos rodea. No esperes a que lo hagan los demás.
Aporta lo que puedas, trabaja, lucha, sé siempre tan buena persona como lo eres
hoy y vive sin hacer daño a nadie ni a nada.
Y Ya está. Sabes cuànto
te quiere la abuela Isabel. ¡Ah! Y la letra; ya sabes.
-FELICIDADES, PRECIOSO. ¡QUÉ BONITA POESÍA! ABUELA Isabel-
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